La vida a través de un gran angular

mg_7102Influenciado por los trabajos de muchos fotoblogers que sigo habitualmente, hace unos meses adquirí un gran angular. Se trata de un Tokina 11-16 mm y he de reconocer que es un objetivo que amplía significativamente las posibilidades creativas de cualquier fotógrafo. Lo uso montado en una Canon EOS 400D, por lo que comparado con las Full Frame actuales o las analógicas, en realidad correspondería a 17,6-25,6 mm.
Yo nunca había trabajado con focales tan abiertas, pues siempre he usado el tradicional 28-80 mm en la era predigital y la verdad es que una vez que lo pruebas, es difícil que no se convierta en un objetivo imprescindible. Recoge mejor lo que ves, pues el campo angular abarcado es muy similar a la visión humana. Creo que es fácil caer en la tentación de beneficiarse del efectismo que produce las imágenes tomadas con este tipo de objetivos y de usarlo en exceso, pero en cualquier caso da mucho juego y es muy cómodo.
¿Qué opinión os merecen este tipo de objetivos?, ¿Con que focales trabajáis más cómodos?, ¿Conocéis alguna compacta que dispare en RAW e incorpore focales entre 17 y 25 mm?
Share

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.