
Todo el mundo tiene una cámara

En más de una ocasión he escuchado o leído que el blanco y negro da más fuerza a la fotografía, que transmite mejor, que es más dramático, más expresivo, etc…y yo me pregunto…¿Por qué apenas hay pintores, directores de cine o artistas en general que usen mayoritariamente el blanco y negro como forma de expresión?. No creo que los grandes pintores del renacimiento se les pasara por la cabeza pintar en blanco y negro, cuando podían hacerlo en color. En los inicios de la fotografía no se podía escoger y había que trabajar necesariamente en blanco y negro, creando toda una manera de ver y entender la fotografía, pero ahora sí podemos escoger.
¿Puede ser que el uso del blanco y negro en la actualidad, aparte de su indudable belleza, sea también una especie de dogma fotográfico heredado del pasado?. Yo creo que es simplemente una forma más de comunicar, ni mejor, ni peor que otras.
Es cierto que el blanco y negro es muy evocador porque nos traslada al pasado, pero también lo son, los virados o las fotografías con «ese» característico color degradado típico de los años 70.
Creo que el blanco y negro es una forma de expresión más básica y menos rica en matices que el color, pero más sencilla y rápida a la hora de trasmitir sensaciones, pero eso no lo sitúa en ningún sitio privilegiado.
No acabo de entender cuando leo que tal o cual fotografía quedaría mejor en blanco y negro que en color. El color aporta más información. Suma, no resta. Otra cosa son los gustos y precisamente para gustos los colores…
Quizás haya que cambiar la frase …»que tal o cual fotografía quedaría mejor en blanco y negro que en color»…por…»que tal o cual fotografía me gustaría más en blanco y negro que en color», ¿no?
Hay un interesante fotoblog llamado «Black & White or color» de Ferran Jordà que muestras sus fotografías siempre en las dos opciones y es curioso porque mientras no ves la opción de color, puedes pensar que la fotografia expuesta en blanco y negro es sencillamente genial, pero cuando la comparas con la de color, te asaltan las dudas sobre cual te gusta más.
Que conste que a mí también me encanta el blanco y negro, pero a veces no puedo evitar pensar que hay demasiada rigidez e incluso cierto fundamentalismo en estas cosas y para eso está este blog, para opinar. ¿Qué piensas tú?
«Un viaje siginifica para mí regresar con un tesoro: Traer imágenes a la altura de lo vivido»
Cristina García Rodero (Agencia Magnum)
Publicado en el País Semanal, nº1711 (12/7/2009)
Acabo de adquirir un nuevo objetivo. Se trata del 50 mm f/1.8 II de Canon. Hace tiempo que iba detrás de él, por varios motivos; el primero por su luminosidad, el segundo por su ligereza y el tercero por su precio (menos de 100 €). Este último motivo varía lógicamente en función de donde lo compres. En esta ocasión lo he comprado en Digital Factory.
Es un objetivo que en situaciones de baja luminosidad te puede sacar de apuros y es ideal para retrato. El retrato es una faceta de la fotografía que me está apeteciendo mucho desarrollar, ya que nunca me he sentido cómodo con esta disciplina y más bien la he eludido, pero viendo los resultados de otros fotógrafos que usan objetivos como este, me ha supuesto todo un estímulo para probarlo. En fin, veremos las satisfacciones que pueda darme.
En este mes de julio le toca el turno a Carlos Cazurro. Poco puedo decir sobre él que no se sepa, pues es un fotógrafo muy conocido, con una gran proyección y un reconocimiento merecido. 2008 ha sido su gran año, ganando el primer premio en la categoría «Paisajes» y el segundo en la categoría «Gentes» del International Photography Contest 2008 que en España organiza el National Geographic, lo que todavía le ha dado más prestigio a su trabajo.
Carlos es un rebelde de la fotografía que hace su propio camino sin dejarse intimidar por los cánones establecidos de la fotografía convencional. Es impulsivo pero con técnica, sabe lo que quiere y lo utiliza para comunicar de forma magistral. Podríamos definirlo como una especie de fotógrafo antropológico sin fronteras, especialmente activo (no para).
Colabora con ACNUR todos los años, con la organización de lo que él denomina «Maratón de fotodonaciones«. Es una iniciativa propia, no exenta de altruismo y que pone de relieve su compromiso social y su calidad humana.
Con un gran fotoblog (¡hecho a mano!) y una gran trayectoria en premios y exposiciones, podemos ver nada más entrar a su morada, que estamos ante alguien que disfruta tanto con esto de la fotografía, que casi roza la obsesión. Es un fotógrafo muy atento a lo que le rodea y raro es que dejé escapar una buena toma.
Carlos es un amigo que surge de la red y aún a pesar de la distancia que nos separa, hemos compartido alguna que otra sesión de fotos y unas cuantas tapas. He de decir que Carlos es reflejo de su fotografía y que sin lugar a dudas es una placer compartir con él, salidas fotográficas, tapeos, debates, discusiones o lo que se ponga por delante, todo ello salpimentado con un especial sentido del humor que le caracteriza.
Si queréis disfrutar un rato entrar en su fotoblog.